martes, 21 de agosto de 2012

¿Cómo pudiste hacerme esto a mí?, Alaska y Dinarama, 1984


Tras el breve paréntesis vacacional, volvemos a la normalidad pildorera de la mano de un tema que habréis escuchado un millón de veces y bailado hasta dos millones. Un tema que, sin duda, habréis reconocido todos desde el mismo título del post... así que, sin más, vamos allá de la mano de Alaska y Dinarama

Si hubo un gran punto de inflexión en la carrera de Alaska, Berlanga y Canut, fue el que se dio en 1984. Hasta entonces, como Alaska y los Pegamoides, su estilo se había movido desde un punk inicial hasta un aire mucho más discotequero. Con el cambio de formación, y de nombre del grupo, se adoptó definitivamente el sonido disco como marca de la casa, eso sí, normalmente con unas letras góticas y tremendistas que serían distintivas de la banda. 

Con este nuevo trasfondo, se editó el álbum Deseo carnal, cuyo primer sencillo, ¿Cómo pudiste hacerme esto a mí?, se alzó hasta los primeros puestos de las listas españolas. Se trataba de un tema enmarcado en el que se conocía como Eurobeat, que no era otra cosa que la versión ochentera de la música disco en el continente. 

Prácticamente al mismo tiempo de editarse el single, Televisión Española comenzó a emitir los primeros capítulos de La Bola de Cristal, lo cual transformó a Alaska en una celebridad de la noche a la mañana a lo largo y ancho del país. Esto fue así hasta el punto de que el siguiente single lanzado, Ni tú ni nadie, acabaría obteniendo un éxito aún mayor si cabe que el del tema de hoy, como bien sabréis la mayoría.

Y sin más, nos vamos ya a la canción... bien pensado, nunca un crimen pasional fue tan bailado, ¿no?




Hasta la próxima.

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